jueves, 29 de septiembre de 2011

Y así quieres ser candidato de la izquierda Ebrard, no me hagas reír.

A defender la autonomía de la UACM (Universidad Autónoma de la Ciudad de México)



LA CRISIS DE GOBIERNO EN LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE LA CIUDAD DE MÉXICO
PARTE I

En la vida real, verdadera, en el radio de acción de la política, rara vez determinan las figuras superiores, los hombres de puras ideas; la verdadera eficacia está en manos de los hombres inferiores, aunque más hábiles: en las figuras de segundo término.
Stefan Zweig, 1929.


La crisis de gobierno que actualmente vive Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) tiene, entre sus principales elementos explicativos, la afectación al patrimonio universitario por parte del gobierno de Marcelo Ebrard Casaubon y la llegada de una administración universitaria -encabezada por la Dra. Esther Orozco-, resuelta a echar bajo la incipiente y compleja construcción de un modelo de gobierno colegiado para ejercer una administración universitaria convencionalmente vertical y unipersonal. Ambos, Orozco y Ebrard usan el presupuesto universitario como el mecanismo principal para restringir la autonomía universitaria.
El gobierno del Distrito Federal (GDF) y la Rectora han atropellado repetidamente la Ley de la UACM y su Estatuto General Orgánico (EGO). La doctora Orozco, además, entre abril y mayo de este año, desarrolló una campaña pública denigratoria contra la institución (a la que calificó como “fraude educativo”). A su llegada a la rectoría, agredió como cualquier patrón de empresa a su sindicato y posteriormente a profesores y estudiantes, lo que provocó la pérdida acelerada del apoyo con el que llegó a la Rectoría.
La crisis en la UACM es, en una parte sustancial, responsabilidad de la Rectora y del Jefe del Gobierno de la Ciudad Capital.
En la primera parte de esta reflexión abordaré la forma en que el gobierno de Ebrard Casaubon ha afectado del patrimonio universitario y la unilateralidad en el manejo de una parte de los recursos económicos de la UACM por parte de la rectora. En una segunda parte, me centraré en la dinámica de deslegitimación de la autoridad de Orozco a partir de sus métodos de confrontación con las y los universitarios de la UACM.
El GDF adopta y pone en práctica criterios neoliberales para la educación superior
Marcelo Ebrard, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, a través del manejo de las finanzas de la Capital del país, ha establecido una relación con la UACM en la que, mediante el control y/o disminución del presupuesto universitario, intenta torcer sus propósitos y fines. En 2007, la Secretaría de Finanzas del GDF retuvo, sin justificación, parte del presupuesto de la única universidad pública creada en México en los pasados 20 años. Esta conducta no es una novedad. Es la implantación de una nueva relación, perversa, de todos los gobiernos estatales, sin importar el partido del que provengan, con la universidad pública. En la década de los noventas las universidades públicas fueron empujadas a realizar cambios en sus fuentes de financiamiento, proyectos y contenidos educativos, gobierno interno, legislaciones y relación con la sociedad. La fórmula de “entrega de recursos contra resultados educativos”, definidos fuera de las instituciones universitarias, se aplicó a partir de esa década mediante mecanismos de evaluación y certificación a las instituciones y su personal.
A través de estos mecanismos, los gobiernos reconducen –es decir, pervierten- la vida universitaria. Si decimos “gobiernos”, en plural, es porque estos cambios fueron promovidos en numerosos países por el Banco Mundial y otras instituciones financieras internacionales. En México, estas políticas generaron tensiones o fuertes conflictos entre las comunidades universitarias y los gobiernos locales o el federal. La huelga de la UNAM de 1999–2000, contra el incremento de las cuotas y por defender el precepto constitucional de educación gratuita, fue el conflicto paradigmático de la etapa. Cada universidad pública tiene una historia sobre la incorporación de estas reformas definidas por los gobiernos para, desde su visión, mejorar la calidad de la educación superior y garantizar la eficiencia. Los conceptos de calidad y eficiencia tienen una connotación gerencialista para los gobiernos que los impulsan. La tendencia del periodo ha sido la de la autonomía universitaria restringida.
El Partido de la Revolución Democrática en el aparato gubernamental de la Ciudad capital y sus diputados que dominan la Asamblea Legislativa (ALDF), han impulsado mínima e insuficientemente la educación superior pública. La aportación del GDF a este nivel educativo es la más baja de todas las entidades del país: en 2009 fue de tan sólo 0.62 por ciento del presupuesto, proporción menor que la de gobiernos de entidades federativas muy pobres como Chiapas (2.92%) y Oaxaca (más del 3%). En ese año, mientras el gobierno federal recortaba los recursos en uno por ciento a las Instituciones de Educación Superior (IES), el gobierno de Ebrard lo hizo en 15 por ciento.
En sentido contrario, en 2010 y 2011 la ALDF destinó recursos para becar a cuatro mil estudiantes de establecimientos de enseñanza superior privados. Con ello, se puso a tono con la promoción y apoyo de este tipo de educación que los gobiernos federales impulsaron en los últimos 20 años. La estrategia ha sido estancar la matrícula de las IES públicas y apoyar a las empresas cuyo negocio consiste en vender estudios de bachillerato y licenciatura.
La retención del presupuesto como instrumento de presión
En relación con la UACM -nacida en el año 2001-, luego de su creación y de un financiamiento razonable para desarrollar sus funciones sustantivas y  su infraestructura durante los primeros siete años, desde las oficinas del Jefe de Gobierno se decide escatimarle recursos. La Universidad sufrió la disminución de su presupuesto a partir de 2007. En ese año, la ALDF aprobó otorgarle 705.2 millones de pesos pero la Secretaría de Finanzas del D.F. disminuyó esa cantidad en 46.5 millones. En 2008, nuevamente, esta Secretaría retuvo 66.7 millones de un total de 100 que le correspondían de recursos provenientes de la Federación y que estaban destinados para infraestructura. Estas disminuciones impidieron la construcción de obras programadas en los planteles San Lorenzo Tezonco y Cuautepec.
En 2009, el gobierno de Ebrard no ministra, es decir, no entrega los 100 millones federales correspondientes a ese año. Aunado a lo anterior, en mayo de 2009, el GDF decide disminuir el presupuesto universitario en 4.9 por ciento -equivalente a 32 millones de pesos-, con el argumento de que la crisis económica obligaba a reducir los presupuestos en todos los niveles de gobierno. Así, entre 2007 y 2009 la UACM es golpeada por el gobierno de la Ciudad a través de la disminución de 245.2 millones de pesos.
En 2008, el Rector -en ese momento, el ingeniero Manuel Pérez Rocha- y el Consejo Asesor de la UACM expresaron al Secretario de Finanzas del GDF las graves consecuencias de tales disminuciones, que obligaron a la Universidad a posponer la puesta en marcha de nuevos programas y a disminuir la matrícula de primer ingreso, que únicamente fue de 2800 estudiantes. En julio de 2009 el Consejo Universitario, el Consejo Asesor y el Rector dirigieron un oficio a Ebrard Casaubon en el que le solicitan una audiencia para expresarle, una vez más, que liberara los 66.7 millones de los recursos federales de 2008; que se diera íntegro el presupuesto de 2009 y que se descartara la aplicación del recorte de 4.9 por ciento.
El Consejo Universitario formó una comisión para entablar el diálogo con el GDF. El 27 de agosto de 2009, seis de sus miembros se reunieron con Mario Carrillo Huerta, Secretario de Educación del D.F; con Armando López Cárdenas, Subsecretario de Egresos del D.F., y con un representante del Jefe de Gobierno. El Secretario Técnico del I Consejo Universitario, Maestro Alberto Benítez, presentó la propuesta de firmar un Convenio Marco con el GDF para que éste comenzara a resarcir el dinero adeudado. Ante el planteamiento de la disminución drástica del presupuesto universitario, el representante de la Secretaría de Finanzas, Armando López Cárdenas, preguntó a los Consejeros Universitarios cuál era el número de egresados que tenía la institución. Se unieron al cuestionamiento el representante de Ebrard y el Secretario de Educación, quien dijo: "los numeritos los tienen bien aprendidos para la situación financiera... pero no conocen el número de egresados". También expresó que había pocos egresados y dijo que así se encontraba antes el Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal, “hasta que intervinieron ellos”.
Carrillo Huerta mencionó que el programa de becas de la Secretaría de Educación a su cargo no contemplaba a la UACM porque en esta institución no se manejan calificaciones. Los Consejeros Universitarios tuvieron que aclarar a los funcionarios capitalinos que la información respecto a la inexistencia de calificaciones en la UACM era infundada y evidenciaba un desconocimiento de la UACM y sus normas[1].
El resultado del encuentro entre los representantes del gobierno de la Ciudad y la Comisión del Consejo Universitario fue el compromiso del Secretario de Educación del GDF de revisar la situación presupuestal de la Universidad y dejar de lado –“por el momento”-, la evaluación de la eficiencia terminal y de “la investigación en la UACM”, entre otros indicadores. Los cien millones de pesos que ese año asignó el gobierno federal, finalmente fueron entregados a la UACM pero se destinaron al gasto de operación y no a inversiones indispensables como laboratorios, talleres, acervos bibliotecarios y construcciones.
De 2008 a mediados de 2010, en las pláticas entre las autoridades de la UACM con los representantes de Ebrard sobre el presupuesto retenido, el GDF no presentó una discusión seria sobre los indicadores de desempeño más allá de comentarios sardónicos. Hasta ese momento, los funcionarios del gobierno capitalino y la mayor parte de los diputados de la ALDF evidenciaron carecer de un conocimiento fundamentado de la institución.
En la cúpula del GDF primaron las percepciones sin comprobación y los chismes sobre la UACM. Sin embargo, toda la información importante sobre la Universidad es pública. Desde su creación y hasta la fecha, ha reportado a la ALDF su Cuenta Pública. Los documentos que fundamentan el proyecto académico y actividades están a la vista de todos en su página de Internet y cualquiera puede conocer la Ley de la UACM y su Estatuto. En ésta se establece que su gobierno es colegiado, lo que significa que las decisiones se adoptan colectivamente y por consenso. El Estatuto General Orgánico define que el Consejo Universitario (CU) es el máximo órgano de gobierno, en tanto que la Rectoría es la titular de la administración y sus funciones se centran en representarla legalmente, en hacer propuestas al CU sobre la gestión y administración, y en ejecutar las decisiones de este órgano. En este modelo de gobierno no existen figuras de autoridad personal.[2]
El ahogo presupuestario y la nueva Rectora
En 2010 la ALDF y el GDF destinaron 755 millones de pesos de presupuesto a la Universidad, la misma cantidad que en 2009. Con este hecho, ambos organismos violaron el Artículo 23 de la Ley de la UACM en el que se establece que la ALDF considerará como programa prioritario el presupuesto destinado a la Universidad, que nunca será inferior al del año previo. A la par, el GDF continuó con su política de no ministrarle los recursos federales. Así, la UACM inició 2010 con tan sólo 655 millones de pesos. El GDF, nuevamente, le adeudaba 100 millones de pesos federales correspondientes a 2010. El adeudo del GDF con la UACM rebasó 200 millones de pesos.
En esta situación de agobio presupuestario generado por el GDF, se da el cambio en la Rectoría (2010), ocasión propicia para que el Gobierno Ebrard avanzara en su objetivo de controlar a la Universidad a través de colocar a la doctora Orozco en ese cargo. Un primer paso, fue apoyarla al mandar señales a la comunidad universitaria de que "con ella sí habrá" recursos presupuestales. Al inicio de la nueva Rectoría, el GDF adeudaba a la UACM 100 millones de pesos de los 755 aprobados por la Asamblea Legislativa. Así, en el arranque de su gestión, la universidad contaba con 655 millones de pesos, lo que le permitió decir a la rectora que la Universidad estaba “quebrada”. Posteriormente, cuando en octubre de 2010 el GDF pagó a la UACM el dinero adeudado, Orozco reportó esos recursos como un logro de su gestión.
La entrega del dinero sirvió igualmente para el lucimiento de Ebrard. Durante la toma de posesión de la nueva Rectora, el Jefe de Gobierno, presente en el acto, anunció, con pose de generoso, que le destinaría a la UACM 200 millones de pesos. Así, entregaría el dinero que su administración había retenido ilegal e injustamente a la UACM en los tres años anteriores. No daba ni medio centavo más que el que le correspondía por Ley. Pero el dinero prometido por el Jefe de Gobierno a la institución se presentó como un regalo del “Mejor Alcalde del Mundo 2010”[3] .
El GDF y la Rectora pasan por encima del Estatuto General Orgánico
Podría suponerse que con la entrega de los recursos por parte del GDF los problemas presupuestarios de la Universidad habían terminado, pero no fue así, porque tanto el GDF como la Rectora dispusieron unilateralmente de estos recursos y no cumplieron con lo que norma el EGO y la Norma de Planeación. El diseño del presupuesto y el ejercicio del gasto de la UACM tienen una normatividad amplia, clara y precisa, que no deja lugar a dudas sobre cómo se debe de disponer de sus recursos. La doctora Esther Orozco no ha respetado los procedimientos en materia de presupuesto y gasto. No se dio por enterada de los Títulos III, VI, VIII y X del EGO ni atendió la Norma de Planeación para definir el destino de los recursos devueltos a la UACM por el Jefe de Gobierno de la Ciudad. 
El Artículo 22 de la Ley de la UACM define que las aportaciones ordinarias, extraordinarias y específicas que le asignen la Federación, el GDF y las Delegaciones del Distrito Federal a la Universidad son partes constituyentes de su patrimonio. En consecuencia, los recursos devueltos por Marcelo Ebrard debían tener el mismo tratamiento que establecen, de forma muy precisa, el EGO y la Norma de Planeación. Según los artículos 123, 126 y 127 del EGO, la UACM debe definir libremente la distribución de su presupuesto, lo que le corresponde resolver al Consejo Universitario.
Sin embargo, la Secretaría de Finanzas del GDF controló el destino de esos recursos sin que pudiera hacerlo a quien le corresponde, el Consejo Universitario. El GDF determinó que los 250 millones devueltos a la universidad (finalmente devolvió esta cantidad y no 200 millones como anunció en mayo de 2010), se entregarían a través de la figura presupuestal denominada "ampliaciones líquidas", lo que le permite "etiquetar" los recursos, es decir, decidir previamente su destino. De esta manera, el GDF conculcó la autonomía de la UACM, al decidir por ésta qué hacer con su patrimonio.
La Rectora confirmó que el destino de estos recursos no había sido decidido por el CU cuando mencionó, por primera vez, durante la II sesión extraordinaria del CU, que una parte de los 250 millones de pesos “otorgados” por el Jefe de Gobierno, ya se estaban ejerciendo. Derivado de este primer conocimiento del tema, el 8 de octubre de 2010 la Comisión de Hacienda del CU le solicitó “compartir y ampliar esta información”. El 13 de octubre, la señora Orozco presentó a esta Comisión y, dos meses después más tarde al CU, una serie de laminillas de power point denominadas  Ingresos de la UACM otorgados por el Jefe de Gobierno de la ciudad de México, Lic. Marcelo Ebrard Casaubon”,  en las que se dice que “el 7 de mayo del 2010 en la toma de posesión de la Dra. Esther Orozco como Rectora de la UACM el Jefe de Gobierno ofreció otorgar 200 millones de pesos para la construcción de laboratorios, bibliotecas, apertura de nuevas carreras y becas”. Es decir, la Rectora acepta que el GDF disponga qué se debe hacer con los recursos de la UACM por encima del gobierno interno de la Universidad.
La rectora de la UACM manejó unilateralmente una cuarta parte del presupuesto universitario
Por si no fuera ya grave lo anterior, el manejo de los multicitados 250 millones -a la fecha-es poco claro. En el documento mencionado de la Rectora se reporta que 50 millones de pesos son para “gastos urgentes varios”, de los cuales 30 millones se destinarían al aumento salarial de 2010. Empero, a mediados de 2011, en un reporte de la Oficina de Transparencia, entregado a un estudiante a solicitud expresa, se establece que la cifra total destinada a este concepto fue de 22 millones, es decir, 8 millones de pesos menos. En el mismo reporte se dice que a la nómina de diciembre se destinarían 55 millones y en realidad se destinaron 19 millones de pesos. En cuanto al pago de aguinaldo, se informó que se gastarían 80 millones y este pago ascendió a 44 millones. Entre las cifras de gasto en el aguinaldo y los salarios de diciembre hay una diferencia de casi 72 millones de pesos. Se informó al Consejo Universitario cifras infladas en relación con el gasto corriente, es decir, en lo que se gastaría en aumento salarial, aguinaldos y salarios de diciembre.
Pero este manejo de las cifras sirvió a la Doctora Orozco para generar la ilusión de que fue ella y la bondad del Jefe de Gobierno las que permitieron que la Institución saliera de su “quebranto financiero”. La realidad es diferente. El gobierno regresó los 100 millones que adeudaba para el gasto corriente de la institución y el resto de los recursos los ministró ilegalmente como “etiquetados”, para que la Rectora pudiera pretextar que la necesaria discusión colegiada de su mejor aplicación no podía realizarse debido a que el GDF había decidido previamente su destino.
Continuando con el reporte de la Rectoría del 13 de octubre de 2010, en éste se precisa que cinco millones de pesos se destinarían para reparar Casa Talavera, cuando a la fecha no se ha arreglado una sola de sus vigas. Otros 10 millones de pesos aparecen como “programa de vigilancia en todos los planteles” y cinco millones de pesos para bibliotecas. Las pocas coincidencias entre el reporte de la Rectora de octubre de 2010 y lo explicado a través de la Oficina de Transparencia son: 15 millones de pesos destinados a los proyectos de investigación ICyTDF-UACM; 5 millones para las becas ICyTDF-UACM para la titulación de los estudiantes y 40 millones de pesos para concluir el edificio de laboratorios y aulas en el Plantel Cuautepec. Esta última entrega dio cumplimiento a los trabajos de edificación que quedaron pendientes en ese plantel desde 2009.
La suma total presentada por la Rectora en octubre asciende a 240 millones pero la suma de las cantidades, tal y como se reportan, es 245 millones de pesos. La suma devuelta por Ebrard Casaubon y publicada en NotiUACM, con fecha marzo de 2011, es de 250 millones. Como se observa, las cifras y su destino cambian con el tiempo.
La Rectora no cumple el EGO al disponer de los recursos universitarios
En el Artículo 126 del EGO se dice que “la planeación, programación y ejercicio del gasto deberán ser congruentes con la planeación, los programas y prioridades institucionales y coadyuvarán al fortalecimiento de las funciones sustantivas, de docencia, investigación, difusión cultural, extensión y cooperación de la Universidad”. Entre octubre de 2010 y mayo de 2011, la Rectoría modificó la información relativa al gasto de los 250 millones de pesos devueltos a la UACM por el gobierno de la Ciudad. Entre el primer informe (y único formalmente presentado al Consejo Universitario) y el informe de la Oficina de Transparencia aparecen nueve rubros que no se dieron a conocer, estos son: 34 millones para la “Remodelación del Edificio Ubicado en República del Salvador 59”; la “compra de camiones para el traslado de estudiantes” por 2 millones de pesos; la “Instalación de Canchas Deportivas” por 4 millones de pesos; “campaña por una UACM sin violencia” por 4.250 millones; equipo para laboratorios por 23.971 millones; “establecimiento de un centro de lenguas extranjeras” por 8 millones de pesos, entre otros.

Sin opinar sobre la pertinencia de todos y cada uno de estos gastos decididos unilateralmente por la Doctora Orozco, el hecho es que la Dra. Orozco tomó la decisión de cambiar el destino de los recursos recuperados por la Universidad sin sujetarlos al dictamen aprobatorio de los órganos colegiados competentes.

Debe resaltarse que las convocatorias emitidas por la administración para financiar  proyectos de investigación y para la realización de tesis de los estudiantes – primeras medidas de su gestión- tuvieron una respuesta entusiasta y numerosa de la comunidad universitaria. Pero a estas actividades académicas sólo fueron asignados 20 millones de pesos, mientras que se destinaron 34 millones de pesos a la  remodelación del edificio de República del Salvador, que de acuerdo con la información de Esther Orozco, será la sede de la rectoría de la UACM.
El manejo impreciso de la información sobre el destino de los 250 millones de pesos recuperados por la Universidad, la decisión de la administración de Orozco sobre cuánto y hacia dónde destinar estos recursos, la hace ver como una administración desordenada, errática y ajena a las normas que existe en materia del ejercicio del gasto. Las formas voluntariosas de ejercer el presupuesto y gestionar la administración son de una típica secretaría de gobierno de la ciudad no de una institución autónoma.

Aideé Tassinari Azcuaga
Academia de Estudios Sociales e Históricos de la UACM,
Plantel Cuautepec


[1] La información sobre el contenido de la reunión relatada, está en la minuta que uno de los Consejeros Universitarios tomó en este encuentro y obra en el expediente de la Comisión Temporal de Seguimiento (2009) y en la Comisión de Hacienda del Consejo Universitario.


[2] De acuerdo con Hugo Casanova, especialista en las formas de gobierno en las universidades, "el modelo colegiado tiene como origen la idea comunitaria de las primeras universidades. La toma de decisiones mediante el consenso de los miembros de la comunidad constituye el fundamento de una coexistencia entre sujetos que, aun teniendo actividades y especialidades diferentes, cuentan con objetivos comunes. En este modelo se enfatiza la no jerarquía, la cooperación y la autodeterminación. La multiplicidad de elementos de la institución se articula por los intereses comunes y el sentido de comunidad académica legitima sus decisiones. También descrito como una forma opuesta a la organización burocrática, el modelo colegiado ostenta un carácter descentralizado en sus decisiones, opuesto al centralizado de aquella”. (Casanova, H., Universidad Contemporánea. Política y Gobierno, Centro de Estudios Sobre la Universidad/Porrúa, México, 1999, págs. 22-25). 

[3] La fundación inglesa City Mayors le otorgó este galardón a Ebrard el 6 de diciembre de 2010 por “abanderar los derechos de la mujer y de las minorías, así como por ser un defensor activo y activo promotor de en asuntos de materia ambiental”, Excélsior ,17/05/2011. El criterio de impulso y protección a la educación pública no es considerado por esta fundación.



viernes, 2 de septiembre de 2011

México: El país más peligroso para ejercer el periodismo en América: ONU.

Asesinan a las periodistas Marcela Yarce Viveros y Rocío González

Alejandro Cruz y Mirna Servín
 

Viernes 2 de septiembre de 2011, p. 5
 
Las periodistas Ana María Marcela Yarce Viveros y Rocío González Trápaga fueron asesinadas entre la noche del miércoles y la madrugada de ayer; sus cuerpos –con signos de violencia– fueron abandonados en un parque a espaldas del panteón San Nicolás Tolentino, en la colonia El Mirador, delegación Iztapalapa.
Yarce Viveros se desempeñaba como gerente de relaciones públicas de la revista Contralínea, medio del que fue reportera y fundadora; a su vez, González Trápaga también fue reportera de Televisa y en los pasados años trabajaba de manera independiente; asimismo fue directora de Comunicación Social del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Fonacot) y era propietaria de una casa de cambio ubicada en el Aeropuerto Internacional de la ciudad de México.
La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) informó que la principal línea de investigación es que se trató de un feminicidio, por la violencia utilizada contra las dos periodistas; sus cuerpos fueron hallados por personas que se ejercitaban en el parque El Mirador, localizado en avenida Morelos, poco antes de las siete de la mañana.
Se informó que las dos mujeres, ambas de 48 años de edad, estaban cubiertas con una lona azul, se encontraban desnudas, atadas de pies y manos, con un cordel alrededor del cuello y presentaban golpes en diversas partes del cuerpo.
Durante al menos siete horas, las víctimas permanecieron en calidad de desconocidas, toda vez que en el lugar no se encontró alguna pertenencia que permitiera identificarlas, hasta que a las 14 horas, familiares de las reporteras –que por la mañana habían denunciado su desaparición al Centro de Apoyo a Personas Extraviadas y Ausentes (Capea) de la PGJDF– las reconocieron en el anfiteatro de la agencia del Ministerio Público de la Coordinación Territorial Iztapalapa 7.
Según las primeras investigaciones, la causa de las muertes de las comunicadores fue por asfixia, aunque se está a la espera de los resultados de la necropsia, así como de los estudios periciales en criminalística y patología.
Asimismo, se informó que la última vez que vieron con vida a las víctimas fue la noche del pasado miércoles, poco antes de las 22 horas, afuera de las instalaciones de la revista Contralínea, ubicadas en el cruce de las avenidas Juárez y Balderas, donde se citaron para aparentemente dirigirse a una reunión.
El caso se turnó a la agencia especializada para la investigación de feminicidios, de la Fiscalía de Homicidios de la PGJDF, que ya inició la averiguación previa correspondiente; además, la Procuraduría General de la República (PGR) abrió también una indagatoria e informó que coadyuvará con las autoridades locales en materia pericial y lo que se le requiera.
El procurador de Justicia capitalino, Miguel Ángel Mancera, se comunicó vía telefónica con los familiares de las dos periodistas, ante quienes se comprometió a investigar estos crímenes hasta sus últimas consecuencias y no dejarlos impunes.

Interesante video de lo sucedido en Monterrey.

Hasta apenas se está descubiendo algo lo que en los primeros días del hecho se empezó a especular...

Alerta, en México se esta preparando el escenario para imponer un estado de sitio, lo que usted esta a punto de descubrir, si es que no lo sabe aún, es que el gobierno mexicano planea una serie de acciones radicales que ablandaran el terreno para la gran transición que planean para el 2012. Para que usted comprenda la dimensión del problema, será necesario que tenga bien claros los antecedentes y el contexto mundial en el cuál se están presentando estos hechos.
La situación es clara y demostrable: El gobierno de Calderón, esta implementando la conmoción, el terror y el miedo, para tratar de imponer un nuevo sistema de control social; la nueva Ley de Seguridad Nacional. En otras palabra, la misma doctrina del shock implementada en tantos ataques de falsa bandera como el del 11 de Septiembre.
Analizemos los hechos, el pasado sábado 20, todo México queda conmocionado al ver como en un estadio de futbol, los futbolistas tienen que salir corriendo en pleno juego para esconderse de los balazos que se podían escuchar bastante cerca, miles de personas en las gradas también se tiraban al piso todo esto en vivo para todo el mundo. Para un país tan fanático y enajenado por el fútbol, este fue un hecho que pondría a la violencia y al crimen organizado en boca de todos, preparando lo que se vendría para la semana siguiente.
Con una fascista y antidemocrática Ley de Seguridad Nacional en plena discusión, el poder fáctico de este país se dispuso a lanzar un nuevo detonante que pueda justificar sus oscuras intenciones.
El pásado 25 de Agosto, un nuevo ataque vendría a conmocionar a la sociedad mexicana, más de 50 civiles en su mayoría mujeres mueren calcinados en un supuesto ataque terrorista perpetrado por Zetas.
En este artículo hemos subido también un video con múltiples pruebas que indican que el ataque al casino royale fue un plan perfecto, cubierto por la policía y preparado con antelación.
El mensaje fue claro: mire usted, existen en nuestro país criminales capacez de matar a uno vilmente sin siquiera haberlo conocido ni tener motivo para hacerlo, es decir en cualquier momento usted puede ser asesinado y usted necesita darnos todo el poder y privilegios posibles para destruir a estos críminales.
La gente ignorante ahora vive más preocupada por el terrorismo, criminalizando cada vez más las drogas, y peligrosamente dispuesta a aceptar una Ley de Seguridad Nacional que en realidad pretende acabar con cualquier los múltiples focos de resistencia y sublevación que están brotando en el país.
Sabía usted que esta ley pretende volver legal la tortura para sacarle información, o que sus cuentas, redes sociales, llamadas teléfonicas y correos pueden ser monitoreados de forma legal; se le estaría dando al ejercito la facultad de reprimir manifestaciones sociales legalmente, todo esta esta a punto de volverse realidad, a menos que hagamos algo al respecto.
Es importante poner atención en una propuesta que esta circulando en internet que invita a los mexicanos a unirse para protestar ante esta masacre dejando de ir al festejo del 15 de septiembre; este es el tipo de propuestas creadas por el estado para saciar un poco la sed de protesta; sin embargo es algo completamente inútil e intrascendente, para el estado sería muy sencillo llenar las plazas públicas de militares y acarreados como ya lo ha hecho en tantas ocasiones, lo que haría falta es lo precisamente lo contrario…
A continuación compartimos con ustedes más detalles de lo que se planea con esta nueva Ley: